Temporada Alta, Festival de Otoño de Cataluña. Girona – Salt, cierra su 26ª edición, que ha presentado, desde el 11 de octubre y hasta el 10 de diciembre un total de 94 propuestas. El Festival se reafirma como uno de los grandes expositores teatrales de las artes escénicas tanto en el país como a nivel internacional. Desde hace años apuesta por programar grandes nombres internacionales de las artes escénicas junto a los artistas más importantes de aquí, ofreciendo un elevado número de estrenos absolutos, estrenos en Cataluña y España, y actuando como uno de los polos de producción escénica más importantes del sur de Europa.
Temporada Alta ha ido creciendo desde sus inicios y justamente el público es su principal aliado, respondiendo de forma masiva a las propuestas presentadas y arriesgándose a descubrir la programación, nuevas propuestas y nuevos artistas. En esta edición han asistido a los espectáculos de Temporada Alta un total de 52.753 espectadores, cifra que representa un 90.54% de ocupación, que en total supone un incremento de público respecto al año pasado.
Temporada Alta ha programado en total 48 espectáculos de estreno; 25 han sido internacionales, procedentes de 16 países diferentes, y 20 han sido propuestas de creación contemporánea. Esta ha sido una edición exigente artísticamente, pero el público ha respondido muy positivamente, tanto en las apuestas más clásicas cómo con las internacionales y de nuevos lenguajes. En total, se han presentado 94 espectáculos y se ha llegado a las 167 funciones, porque la gran demanda de entradas ha obligado a añadir 22 funciones adicionales de 12 espectáculos diferentes.
Programación y proyección internacional
Temporada Alta ya forma parte del circuito internacional de festivales y como tal, este año, ha programado algunos de los grandes nombres de la escena europea y del otro lado del Atlántico como Alain Platel, Guy Cassiers, Declan Donnellan, Romeo Castellucci, Oskaras Korsunovas, Josse de Pauw, la compañía 1927, Los Colochos, La Congregación Teatro, Federico León, Christiane Jatahy o Mariano Pensotti.
En total, se han presentado 25 espectáculos de fuera de Cataluña, con el objetivo de no sólo incorporar nombres internacionales en el programa sino para alimentar también la creatividad de artistas del país y favoreciendo la llegada de profesionales y agentes internacionales. De estas alianzas han surgido este año tres coproducciones internacionales, todas con gira o temporada prevista después de su estreno en el Festival: The Mountain, the Truth and the Paradise, de la compañía Mal Pelo y en colaboración con el Théâtre de la Ville de París y el Théâtre del Archipel de Perpiñán, No se registran conversaciones de interés, de Roger Bernat, una coproducción del francés MUCEM de Marsella y el Grec – Festival de Barcelona, y iUanMi, coproducida con el Festival de Bolzano de Italia
La internacionalización de Temporada Alta
La Semana de Programadores que organiza el Festival es un buen ejemplo del nivel de internacionalización de Temporada Alta y del trabajo hecho con los artistas y los profesionales nacionales e internacionales. Este año ha llegado a su séptima edición, la cual, si bien no ha contado con un apoyo institucional directo, ha mantenido la presencia de profesionales internacionales y nacionales. Concretamente, esta edición ha contado con 85 asistentes de 12 países diferentes, incluyendo representantes de teatros y festivales tan importantes como el Festival de Atenas, los Teatros del Canal de Madrid, o el festival CIRCA de Oix.
Cómo en las anteriores ediciones, la programación de la Semana de Programadores ha mostrado a público y profesionales propuestas de artistas de fuera (Romeo Castellucci, Rocío Molina, Christiane Jatahy) pero el centro de la programación han sido las propuestas de los artistas del país, como por ejemplo Mal Pelo, Conde de Torrefiel, Lali Ayguadé, Animal Religion (Quim Giron), Roger Bernat y Atresbandes.
La vocación internacional de Temporada Alta no acaba aquí y ahora que se acaba el Festival, arranca Temporada Alta en Iberoamérica, una iniciativa que cuenta con el apoyo del Instituto Ramon Llull y AECIED entre otros. El proyecto hace de trampolín para que artistas de aquí puedan presentar sus producciones al otro lado del Atlántico, dando a conocer el talento catalán y fomentando nuevas alianzas y relaciones con el teatro y los artistas iberoamericanos. Así pues, en el próximo mes de febrero se celebrará la sexta edición de Temporada Alta en la Iberoamérica, con programación en Buenos Aires (Argentina), Montevideo (Uruguay) y Lima (Perú).
Los estrenos y las coproducciones de Temporada Alta
Desde hace años Temporada Alta participa en coproducciones, creando e intentando consolidar cada vez más una línea de producción propia y definida. De este modo el Festival ha participado en la producción de espectáculos de grandes nombres del país como Pau Miró, Lluís Homar, Àlex Rigola, Mal Pelo, Sol Picó, Roger Bernat o Xicu Masó, y a su vez ha dado apoyo a creadores más jóvenes o menos consolidados a los que hay que apoyar para que puedan aportar su talento en nuevas producciones.
Este año el Festival ha participado en la producción de 26 nuevos espectáculos y, como en los últimos años, lo ha hecho con todo tipo de socios, desde las grandes instituciones del país como el Teatro Nacional de Cataluña, el Teatre Lliure, Sala Beckett o el Mercat de les Flors, hasta compañías privadas, productoras privadas o artistas independientes. De momento, 16 de las producciones tienen vida confirmada más allá del Festival.
Precisamente algunas de las coproducciones del Festival han estado entre las propuestas más celebradas tanto por el público como por la crítica. En concreto, Vania, de Àlex Rigola, que se podrá ver esta temporada en los Teatros del Canal de Madrid, propone una renovación importante en las tendencias teatrales. Buscando la verdad de los personajes, los cuales se denominan los unos a los otros por su propio nombre y traen su ropa habitual como vestuario, Rigola ha presentado el clásico de Chejov de una manera minimalista, en una caja de madera con aforo para 60 espectadores y donde el público tiene una proximidad única con los actores que convierten el texto en un juego teatral poco frecuente en nuestros escenarios.
Este año ha habido 26 estrenos absolutos y se han estrenado en el Festival obras de estilos y formatos muy variados como Cyrano, con Lluís Homar y dirección de Pau Miró, Blasted de Sarah Kane dirigida por Alícia Gorina, Els nens desagraïts de Llàtzer Garcia, El Metge de Lampedusa dirigida por Miquel Gorriz y con Xicu Masó, Dancing with frogs de Sol Picó, Adossats de Ramon Madaula dirigida por Jordi Casanovas, Guerrilla de El Conde de Torrefiel (en este caso, el festival ha acogido el estreno en España), Medusa de La Virgueria sobre el texto de Ricardo Menéndez Salmón, o Spender de El Vol del Pollastre, escrita y dirigida por Llàtzer Garcia. Además, el festival ha presentado 11 estrenos en el España y 12 estrenos en Cataluña, de directores y compañías internacionales.
Las cifras de Temporada Alta
A nivel de balance económico, la partida de ingresos del Festival (que tiene un presupuesto global de 3.189.113,16€) se distribuye así: taquillas (21%), patrocinio (30%), Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya (22%), Ayuntamiento de Girona (19%), Diputación de Girona (8%), y Ayuntamiento de Salt (1%). Este hecho es importante porque se acerca a lo que se considera ideal: 33% de dinero público, 33% de taquilla y 33% de patrocinio y mecenazgo, una fórmula que marcará la producción y la programación de los próximos años.
Demanda en la devolución del IVA
El apunte negativo lo marca la demanda de devolución del IVA de las subvenciones culturales de los últimos cuatro años por parte del Ministerio de Hacienda, hecho que está complicando la gestión del Festival, ha afectado el trabajo de los que trabajan en él y dificulta enormemente la continuidad del proyecto. La interpretación actual por parte de la Agencia Tributaria de que las subvenciones culturales estén sujetas a IVA – que confronta con la que se había hecho hasta ahora, y con la reciente aprobación del Congreso de los Diputados de no aplicarlo a las otorgadas a proyectos culturales- implica la reclamación a Temporada Alta del pago de 1.400.000 euros correspondiente a los ejercicios entre 2012 y 2015. Así pues, esta situación hace muy difícil la viabilidad del Festival en un futuro inmediato. Un fuerte golpe para el Temporada Alta.
Temporada Alta y los proyectos de futuro
A pesar de acabar esta edición con la incertidumbre de si el Festival tendrá continuidad el próximo año, Temporada Alta no deja de mirar hacia el futuro. Uno de estos proyectos es seguir desarrollando es A TEMPO, Artes y Formación, propuesta que este año se ha implementado por primer año en el Festival y de la cual se hace una valoración muy positiva. De este modo, Temporada Alta seguirá trabajando su vertiente social y educativa para acercar las artes escénicas al mundo de la educación a través de un gran número de iniciativas con profesionales de la educación y las artes escénicas, escuelas e institutos. Este proyecto se enmarca dentro del Festival Temporada Alta y está impulsado por la Fundació La Ciutat Invisible, con la colaboración de la Fundación Banco de Sabadell. Este año han participado 3690 estudiantes, 181 docentes y 69 artistas.
Proyecto Europeo y gira internacional
Otro de los proyectos que marcará las próximas ediciones del Festival, del 2018 al 2020, es la selección de Temporada Alta para formar parte de Pyrenart, un proyecto europeo presentado en la línea POCTEFA / Interreg y que recibirá ayuda de la región Pyrénées. El objetivo principal de la iniciativa es la colaboración de entidades de diferentes regiones y define su ámbito de actuación en varios puntos que se añaden al objetivo de internacionalización en que Temporada Alta hace tiempo trabaja: impulsar y crear condiciones para la internacionalización de los participantes; la producción y difusión internacional de las coproducciones creadas dentro de la red Pryrenart, la promoción y ayuda a la internacionalización de las compañías de las regiones participantes y la circulación de propuestas entre los miembros de la red.
Por último, la apuesta del Festival para propiciar el trabajo conjunto de artistas del país con otros internacionales, tendrá el próximo año una primera gira internacional y temporada en Madrid: Davant la Jubilació (Ante la jubilación), coproducción de Temporada Alta con el Teatre Lliure, dirigida por Krystian Lupa e interpretada por Pep Cruz, Marta Angelats y Mercè Arànega. El texto de Thomas Bernhard basado en hechos reales se estrenó el año pasado en el Festival y fue la primera vez que el director polaco participaba en una producción dirigiendo actores de aquí.
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