Dueñas, obtuvo la popularidad por sus muchos trabajos en televisión. En concreto, destaca su papel como padre de Lucía en la serie ‘Aquí no hay quien viva’.
El actor era uno de los «últimos supervivientes» del Teatro Español Universitario de Madrid, donde dio sus primeros pasos en el mundo de la interpretación. Dueñas nunca ocultó su «adicción» por el teatro, donde interpretó papeles tanto protagonistas como de reparto.
No obstante, fue requerido por grandes directores cinematográficos desde que debutara en 1966 en la película ‘La busca’, de Angelino Fons. Posteriormente trabajó en papeles de reparto en varias ocasiones para Pilar Miró (‘El crimen de Cuenca’, ‘Gary Cooper, que estás en los cielos’ y ‘Tu nombre envenena mis sueños’) y también en ‘Divinas palabras’, de José Luis García Sánchez.
En teatro sí abordó importantes papeles destacando su trabajo en ‘Angelina o el honor de un brigadier’, ‘La marquesa Rosalinda’, ‘Hair’, ‘Toc Toc’ (la Unión de Actores le premió como mejor actor protagonista) o ‘Sabor a miel’. Su participación en numerosos montajes fue constante desde que en 1975 trabajara en el musical ‘Godspell’.
Desde los años sesenta fue un rostro habitual de TVE, especialmente en espacios dramáticos como ‘Estudio 1’ o ‘Teatro de siempre’. En 1984 protagonizó la serie ‘Cosas de dos’ y posteriormente participó en ‘Los negocios de mamá’, ‘La banda de Pérez’ y ‘Agente 700’, entre otras series.
Dueñas fue incinerado este domingo a las 14.30 horas en el Tanatorio Sur de la carretera de Toledo, donde estuvo instalada la capilla ardiente.