Así lo ha avanzado el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, quien ha resaltado que el Ejecutivo regional va a trabajar en «limitar el número de funciones» de este certamen, que se realizaría «no antes del mes de agosto», y cuya celebración serviría «como piloto para que luego se puedan tomar decisiones sobre otros festivales culturales que se realizan en nuestro país».
El consejero de Sanidad ha defendido que el Festival de Teatro Clásico de Mérida es «un emblema para toda la comunidad autónoma y para todo el país», por lo que ha abogado por que se pueda celebrar «con ese aforo de 800 personas, como dice la fase 3 de la desescalada», ha dicho.
«Si pudiésemos incrementar el aforo pues lo haríamos, pero en principio con un aforo de 800 personas, al ser al aire libre y al estar sentado el público», y limitando el número de funciones, ha señalado Vergeles en una entrevista en Canal Extremadura Radio.
Estas son las condiciones que la Junta de Extremadura propondrá al Ministerio de Sanidad, que será el que tenga que decir sobre la celebración o no de este certamen.
«Lamentablemente no les podemos dar más certidumbre en ese sentido, anticiparse a eso es una situación muy complicada porque dependendemos de las próximas semanas y de cómo nos vayamos comportando», ha destacado el consejero de Sanidad, quien en cualquier caso ha apuntado que el aforo sentado «es mucho más controlable que lo que son las fiestas populares de los pueblos, que se suelen realizar de pie y sin el distanciamiento social oportuno», ha dicho.