Tania Brenlle, directora artística de La Villarroel, comentó que el concepto de familia será «el denominador común de la nueva temporada». Así es el texto inédito de Valente, que según Brenlle, interpela mucho al público al plantear la cuestión de si «estamos a gusto o no con nuestras vidas. Siempre estamos dispuestos a cambiar con lo que no estamos de acuerdo». Finalmente, dió las gracias al director argentino por volver a confiar en esta sala para representar sus propuestas y ha dado la bienvenida a la sala a Albert Pérez, quien debuta, y a Mercè Arànega, quien no actuaba desde hacía décadas.
Nelson Valente se ha mostrado entusiasmado de volver a trabajar con Joan Negrié tras coincidir en El loco y la camisa perquè. «Con Joan comparto una mirada de humor sobre la vida y el teatro». La familia tiene un peso muy importante en esta pieza: «en Els Gossos hablo de la no-vida, es un tema que me interesa mucho más que la muerte o la pandemia (del Coronavirus); también de la identidad: ¿Uno es quién le dicen que debe ser o quién realmente es?». Valente reconoce que es observador y que sus obras siempre tienen un componente de experiencias reales. Valente vuelve a La Villarroel, la que el autor argentino considera «mi sala favorita de Cataluña». Escribió el texto durante 8 meses, con la colaboración de Joan Negrié. «Yo escribo mucho para los actores, para mí compañía y para quien va a representar. El proceso fue súper lindo, muy lúdico, rellenando el material que escribo con la experiencia de los actores». Finalmente, sentencia que Els Gossos «es una comedia donde el público se ríe, al final se ríe menos … y luego se pregunta: ¿De qué me estoy riendo?».
Joan Negrié también se ha mostrado muy contento de volver a trabajar con Valente. Hace tiempo que se conocen y querían hacer otra obra juntos, «con mucha autenticidad». Negrié, quien también gestiona la productora Sala Trono, ha descrito el proceso de ensayos: «Hemos ido sumando cosas. Hemos llegado muy cómodos y muy a gusto en el inicio de funciones». Además, sentencia «La Villarroel es como mi segunda casa aquí en Barcelona».
Mercè Aránega ha comentado que «ví dos veces El loco y la camisa, rara vez veo dos veces una obra. Fue un pelotazo. Vas riendo pero al final…». También vio El declive, y ha explicado que tras verla «hablé con Tania (Brenlle) para decirle que quería trabajar con él. Cuando me llegó esta propuesta, dije que sí antes de leer el guión». Trabajar con la compañía ha sido un gusto por Aránega, que añade: «Somos una familia pequeña, y más en la época que vivimos ahora». Confiesa que nunca había coincidido sobre los escenarios con los otros actores pero que «se han cumplido las expectativas».
Sandra Monclús describe los ensayos de la obra como «un proceso feliz, agradable y lúdico. Es un juego trepidante». Respecto a su personaje, Laura, comenta «ella tiene una revelación. Se replantea todo. Cambia la mirada que tiene sobre ella misma y la mirada que tiene sobre todo el mundo».
Sobre el espectáculo
Laura hace 40 años, su pareja le ha organizado una cena para celebrarlo con sus suegros. En el metro de camino al trabajo, un tipo algo extraño se la queda mirando. No hace nada más, simplemente la mira, le sonríe y le dice algo al oído.
Una vez en casa aquellas palabras le resuenan constantemente mientras Emilio, su suegro, le cuenta batallitas de los viejos perros de la familia. ¿Y si esta vida que tenemos fuera una real mierda? Y si, tal vez, ¿hemos estado todo el tiempo pensando que éramos felices trabajando de 9 a 5 en un trabajo que odiamos, aguantando cabezas que nos piden explicaciones, incluso para qué hora paramos a comer, cuando en realidad somos un grupo de infelices? ¿Esta es la vida que queremos?
El espectáculo de Nelson Valente nos propone una mirada a conciencia sobre nuestras vidas y la insatisfacción que encontramos en ellas. Los personajes han quedado para celebrar un cumpleaños, pero poco a poco lo que inicialmente parecía una conversación de sobremesa familiar se convierte en una explosión de reproches y frustraciones. Decepciones y resentimientos universales que, quien más quien menos, todos hemos experimentado y posiblemente seguiremos experimentando.
Quizás dudar y saber qué queremos hacer no es tan malo… Quizás sí podemos tener una vida que nos haga felices.
Sinopsis
El día de su cuarenta aniversario, Laura tiene una experiencia fugaz pero demoledora: durante su trayecto habitual en metro, un desconocido le sonríe y le dice algo al oído. Ya en casa, durante la fiesta, aquella semilla germinará y acabará bombardeando la «supuestamente» asentada vida familiar, a pesar de los esfuerzos de Laura para mantener la unión con y entre sus seres queridos.
Albert, Emili y Alicia, confortablemente acomodados en sus miedos, se verán abocados a revisar ciertos planteamientos que convertirán su apacible hogar en un campo de batalla, mientras Laura, se descubre capaz de su mayor heroicidad: atreverse a mirar desde la conciencia.
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