Las representaciones serán del 5 al 9 de octubre
Con esta adaptación del clásico de Lorca, Gustavo Ramírez realiza un punto de inflexión en su carrera que lo lleva a reflexionar sobre la honestidad en el trabajo y en el amor. Sus intérpretes son: Javier de la Asunción, Seth Buckley, Guiulia Cenni, Diana Huertas Cegarra, Javier Pérez Pérez, Eduard Turull Montells, Itxia Sai Mediavilla, Eduardo Zúñiga, József Forro (cover) y Cristina Reolid (cover).
En esta obra, considerada una de las más importantes del siglo XX, el poeta granadino se desprendió de todas sus máscaras y habló de sí mismo como minoría por su condición de homosexual.
Escrita en 1930, la obra no fue estrenada hasta 56 años más tarde. Es una obra surrealista en la que se juega con la ambigüedad sobre qué partes son alucinaciones, sueños, deseos, y cuáles son hechos reales.
‘El público’ muestra los deseos homosexuales reprimidos y defiende la libertad amorosa.
El suyo es un viaje literario sin éxito, en el que se muestra la existencia de un teatro al aire, o comercial, frente a otro teatro bajo la arena, en el que se tratan los temas personales de los cuales no se suele hablar porque incomodan.
El coreógrafo expone estas situaciones y actitudes en su baile, que es un canto a la libertad, frente a la coerción que ejercen los espectadores tanto en el teatro como en la calle.
Según Gustavo Ramírez, cada vez que vuelves a leer el texto encuentras elementos nuevos en este texto en el que García Lorca plantea el tema de la honestidad, tanto en el amor, como en el trabajo del artista, al que defiende de la injerencia del público, que tiene derecho a opinar sobre el trabajo del artista pero no a influir en él.
García Lorca, que habló en su obra mucho de las minorías marginadas, gitanos, mujeres, etc., en ‘El público’ trata de la minoría a la que él perteneció y por la que se sintió estigmatizado toda su vida. Y en esta obra habla del teatro y habla del deseo, con un juego de máscaras en el que se superponen la ficción y la realidad, con unas identidades en continua metamorfosis en pos de la honestidad y la libertad.