En concreto, según el borrador de las medidas que aborda este Real Decreto, el Ejecutivo habilitará un «acceso extraordinario» a la prestación por desempleo para los trabajadores de la cultura, que «por su intermitencia no habían quedado amparados por los mecanismos de cobertura establecidos hasta la fecha», y que afectará al 45 por ciento de los contratos de trabajo del sector artístico de «carácter intermitente», como es el caso de una «actriz de teatro» o de un «técnico cinematográfico». La duración de la prestación será de un máximo de 180 días y será incompatible con otras rentas de la Administración.
Por otro lado, el Gobierno dotará con 20 millones de euros a la Sociedad de Garantía Recíproca CREA SGR, con el fin de facilitar la financiación de las pymes del sector cultural, de los cuales más de 3,7 millones están destinados a pagar costes de avales de las empresas culturales, mientras que más de 16,2 millones estarán destinados al «fondo de provisiones técnicas».
Asimismo, este Real Decreto-ley pretende incentivar la participación ciudadana, por lo que eleva en cinco puntos los porcentajes de deducción previstos: hasta el 80% para los primeros 150 euros y al 35% en lo que exceda esa cantidad, si bien este porcentaje se eleva al 40 por ciento si en los dos ejercicios se han realizado donaciones por el mismo importe o superior a favor de la misma entidad.
Por otro lado, esta norma contempla el abono de los gastos subvencionables realizados, cuando los proyectos o actividades no hayan podido llevarse a cabo, total o parcialmente, a causa de la Covid-19, y facilita el anticipo e indemnizaciones en los casos de aplazamiento o cancelación de las actuaciones contratadas con el sector público, para contratos que no excedan los 50.000 euros. Asimismo, y se anticipa así hasta un 30 por ciento del importe de los contratos de interpretación artística, en caso de suspensión; y se acuerda una indemnización a favor del contratista entre el tres y el seis por ciento del precio del contrato.
Ayudas a los cines
Este Real Decreto-ley incluye varias medidas destinadas al sector cinematográfico, entre las que destaca la flexibilización de los cumplimientos de los requisitos para obtener ayudas a la producción de largometrajes y cortometrajes y evitar los «incumplimientos en cadena». Además, y para generar liquidez en las productoras que han recibido ayudas, se les adelantará el pago de parte de la ayuda otorgada antes de que inicien el rodaje y se permitirá que entre los gastos subvencionables se incluyan aquellos directamente vinculados con el impacto de la crisis. Del mismo modo, esta norma contempla una «exención temporal de la obligación de estreno comercial en salas de cine» para las películas que optan a las ayudas.
En esta línea, el Gobierno también incluye una nueva línea de ayudas con la creación de un Crédito Extraordinario por importe de 13,2 millones de euros para la concesión directa de subvenciones a los titulares de salas de exhibición cinematográfica independientes, para paliar los gastos derivados de la Covid-19 en su reapertura.
Además, el sector cinematográfico también se beneficiará de un «incremento de los incentivos fiscales» relacionados con la producción cinematográfica de largometrajes y cortometrajes, que incluyen una deducción del 30 por ciento respecto del primer millón de base de la deducción, constituida por el total de la producción así como por los gastos de obtención de copias y de publicidad; y la deducción del 25 por ciento sobre el exceso de dicho importe. Asimismo, en el caso de las producciones internacionales, se reduce el límite de un millón de euros a 200.000 euros para el caso de producciones de animación y procesos de efectos especiales digitales; y se amplía el porcentaje de máximos de ayudas para cubrir producciones de realizadores noveles.
Artes Escénicas y música: 38,2 millones de euros
Por otro lado, este Real Decreto-ley incluye un sistema de ayudas extraordinarias por importe de 38,2 millones de euros dirigido específicamente al sector de las artes escénicas y de la música, que se concederán por una sola vez y a través de «régimen de concurrencia» a través de dos líneas: al sostenimiento de las estructuras culturales de toda índole y a las actividades escénicas y musicales y proyectos culturales.
En el sector del libro, el Gobierno destinará cuatro millones de euros en ayudas para librerías independientes, mientras que en el ámbito de las bellas artes se incorporan ayudas extraordinarias por valor de un millón de euros para la Promoción del Arte Contemporáneo, y en concreto para el desarrollo de proyectos de innovación digital que fomenten la difusión de las artes visuales, la creación artística, la comunicación, la difusión internacional y la adquisición de arte contemporáneo español.
Asimismo, el Ejecutivo permitirá que las entidades de gestión colectiva de derechos de autor incrementen el porcentaje que destinan a acción asistencial y, durante dos años, las asambleas generales podrán aumentar el porcentaje de los recursos procedentes de derechos huérfanos a la realización de actividades asistenciales, en beneficio de sus miembros más vulnerables.
Por último, se incluye también el incentivo de la inversión privada en estos eventos declarados «Acontecimientos de Excepcional Interés Público»: el Plan Berlanga, puesto en marcha con ocasión del centenario del nacimiento del cineasta; la salida de la vuelta al Mundo a Vela en Alicante; y la participación de España como País Invitado de Honor en la Feria del Libro de Fráncfort en 2021.