Este verano, el Teatro Lara se convierte en refugio para la cultura y los amantes del teatro que no quieren renunciar a una tarde-noche especial (y fresca) en el centro de Madrid. Comedia ligera, comedia social, dramas, revisión de clásicos, pequeñas joyas y grandes producciones forman una cartelera repleta de opciones para atravesar con mejor pie el verano madrileño
Para premiar al público que apueste por el Lara este verano, el teatro ha lanzado un bono gracias al que se podrán adquirir 8 entradas al precio de 30€ para quién quiera sin coste adicional y para toda la programación.
La producción propia Cádiz estará el verano completo en cartelera. Esta comedia, que está llenando las salas del Lara, está dirigida por Gabriel Olivares con texto de Fran Nortes (Las chicas del cable, La que se avecina), que se reserva uno de los protagonistas de esta comedia que nos traslada a la vida de tres amigos de la juventud a los que la vida no termina de separar pero tampoco de unir. Cádiz es una comedia de carcajada perfecta para una noche de verano. A Nortes, lo acompañan en el escenario Nacho López (Al salir de clase, Servir y proteger, Cristo y Rey) y Bart Santana (Física o química, Mercado Central).
Otro dramaturgo que veranea en el Lara es Ramón Paso, acompañado de Ana Azorín e Inés Kerzán, trío que forma la compañía PasoAzorín con tres obras cosechan el respaldo de la crítica y el público. La recién estrenada Ausencia de Bernarda, un texto que nace del clásico de Federico García Lorca La casa de Bernarda Alba y que nos traslada a una casa en la que Bernarda trae miedo, rudeza y aparta las ternuras de unas hijas condenadas a obedecer y no vivir. Para ello, se sirve de la Poncia como una suerte de hilo conductor que abre la puerta para ahondar en las relaciones entre las hijas de Bernarda.
También está en cartel La importancia de llamarse Ernesto, versión con el sello de Ramón Paso del clásico de Oscar Wilde que “ofrece frescura y risa, inconformismo, ganas de vivir, una visión feminista, moderna bajo el absoluto respeto por el texto y el espíritu de Wilde”, según las palabras del director y dramaturgo. “Nos diferenciamos de otros montajes porque nuestra versión está muy viva, es gamberra. Los clásicos se ponen en escena muchas veces amparados en la cursilería y nosotros, al revés, es una función muy canalla y sexi.
Por último, Filomena, una de las comedias de más éxito de la programación teatral madrileña que lleva más de un año cosechando aplausos en la Sala Lola Membrives.
Novedades frescas
Las novedades de julio y agosto se concentran en la Membrives. El 30 de julio se podrá disfrutar del estreno absoluto del montaje de terror Oscuridad, una distopía que sumerge al espectador en las tinieblas de un mundo sin luz y en el que sus protagonistas tratan de sobrevivir. Antes se estrena Danny y Roberta, con dos únicas funciones el 20 y el 27 de julio, una obra sublime del autor norteamericano John Patrick Shanley, ganador de un Oscar al Mejor Guión Original en una de sus películas.
En la primera semana de julio llegarán dos nuevos montajes al Lara y vuelve Me quedé antigua. Las nuevas incorporaciones son la comedia (a ratos) Cuentos surrealistas para mujeres reales, de Antonio Zancada que se estrena el 4 de julio; e Ilusiones, el 7 de julio, de Esteban Ciudad, una divertida comedia que reflexiona sobre los golpes que nos da la vida y cómo nos enfrentamos a ellos. Sin olvidar el regreso de Me quedé antigua el mismo 7 de julio, donde Benja de la Rosa aborda las relaciones tóxicas y los peligros de las nuevas tecnologías con una obra inspirada, muy libremente, en la película de Robert Aldrich El asesinato de la hermana George.
Cierran el mes, Al final no voy a cenar, historia de un peculiar secuestro, y el estreno absoluto de Entrevista, un thiller lleno de giros donde se deja a la vista conflictos y contradicciones de una sociedad mas pendiente de ser productiva que empática. Son el 26 y el 28 de julio.
Las novedades de agosto las abre el día 3 Pablo Piñeiro con su monólogo Lo positivo de fracasar en el amor, dirigido por Fran Perea, en el que este artista polifacético (antes futbolista profesional) se desnuda metafóricamente ante el público para explicar su camino de reconstrucción desde un joven analfabeto emocional hasta convertirse en un gurú del amor según la revista Cosmopolitan.
Le seguirá el 5 de agosto el regreso de la comedia Gente encerrada en sitios, de Oniria Teatro, en la que una serie de personajes ven cómo sus instintos de supervivencia y su paciencia son puestos a prueba al quedarse encerrados en lugares tan dispares como ascensores, estudios de radio, baños, trenes, hospitales, o el rellano de la escalera de su propia casa.
Cierra los estrenos de verano el día 30 Divorcio, de Gustavo Ott, es una comedia sobre una pareja que decide divorciarse de la sociedad; hacen separación de bienes con cualquier signo de humanidad, se separan de las ideas de la vida en común con los demás. Protagonizada por Arlette Torres e Iván Ugalde, bajo la dirección de Consuelo Trum.
Más cartelera
Otra obra que está llenando sala es Madres, una comedia desesperada en la que cinco mujeres se quedan encerradas en la sala de espera de un colegio. El aislamiento desbordará en una terapia de límites insospechados, sacando a relucir las sombras y las luces de la maternidad. Ideal para que las madres que afrontan el verano con la prole se tomen un respiro…
Por último, destacar una obra que está teniendo muy buen respaldo del público: Extremo. Un thriller trepidante que plantea un debate moral importante y profundo en la sociedad actual en la que las leyes sobre la violencia sexual están en constante transformación y dialogo de la agenda política y social.