El nuevo espacio se rehabilitará para albergar las colecciones almacenadas del Museo, que actualmente se encuentran en una nave fuera del núcleo urbano
Un espacio idóneo para la conservación
Los espacios de este nuevo edificio lo hacen idóneo para el almacenaje y conservación de obras de arte. Sus características constructivas –grandes muros de piedra, fábrica de ladrillo y vigas de madera– mejoran la inercia térmica del edificio y facilitan las exigencias de capacidad, seguridad y estabilidad para la adecuada preservación de este patrimonio.