El pintor se autodefine como un artista del “realismo y la figuración sin llegar al hiperrealismo”. Como buen dibujante, maneja con maestría las texturas y las formas, fruto del dominio de la técnica y de una paciente y elaborada ejecución. Ha recibido numerosos premios y ha participado en multitud de exposiciones. Igualmente, su obra está presente en los principales museos e instituciones: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Museo de la Real Academia de Bellas Artes, Calcografía Nacional, Dirección General de Bellas Artes y Gabinete de Estampas de la Biblioteca Nacional, Museo Arqueológico y Patronato de la Alhambra, Academia de Bellas Artes de Sevilla, Museo Nacional del Teatro, Institut del Teatre-Palau Güell de Barcelona, Instituto Nacional de Estudios de Teatro de Buenos Aires, etc.
Afirma Hernández Quero que “después de la pintura, lo que más le gusta es el teatro”. Y, por este motivo, gran parte de su producción en dibujo –con predominio de técnica mixta, en la que intervienen la aguada, la plumilla y la acuarela- rinde homenaje a la dramaturgia española. En este contexto se sitúan los dos retratos donados. Estas obras se unirán a la colección extraordinaria de sus retratos de actrices, cupletistas, vedettes de revista, reinas de Broadway, cantantes de copla y dramaturgos: Celia Gámez, Elena Powell, Antoñita Moreno, María Fernanda Ladrón de Guevara y su hija Amparo Rivelles, Catalina Bárcena, Estrellita Castro, La Caramba, La Fornarina, Raquel Meller, Federico García Lorca, Oscar Wilde, Miguel de Molina, el maestro Alonso, etc… que ya forma parte de la colección de dibujos y pinturas del Museo Nacional del Teatro.