El sector de las artes escénicas y la música alerta de que, en el periodo comprendido entre marzo y mayo de 2020, ha debido hacer frente a la suspensión de unas 30.000 funciones y a unas pérdidas superiores a los 130 millones de euros, que podrían incrementarse en los próximos meses
La práctica totalidad de las asociaciones profesionales de creadores, compañías, empresas productoras y distribuidoras, técnicos del espectáculo y espacios de exhibición que integran el sector escénico y musical de España han suscrito un documento conjunto en el que reclaman a las administraciones, a través de 52 propuestas, una batería de medidas extraordinarias que permitan afrontar los efectos del coronavirus.
Este documento es fruto de las aportaciones consensuadas por las 33 entidades que han participado en las diferentes mesas de trabajo constituidas.
Para estas asociaciones y colectivos, la actual situación de crisis «ha puesto de relieve nuevamente la necesidad de que el Estado y sus diferentes niveles administrativos consideren a la cultura en general, y a las artes escénicas y la música en concreto, como un sector estratégico».
El documento reconoce que, pese a que se han presentado «medidas económicas audaces y extraordinarias», estas no son suficientemente «específicas» ni garantizan una respuesta adecuada para un sector al que caracteriza su «estacionalidad» e «intermitencia».
La situación actual, detallan, exige «una acción conjunta de todas las administraciones». «Es imperativo que los principios de coordinación, cooperación y colaboración interadministrativa sean una realidad para afrontar con solvencia esta crisis», han subrayado.
La batería de medidas propuestas incluye un programa de acciones en ámbitos como la contratación pública y otras relacionadas con la Seguridad Social, la financiación empresarial, las concernientes a las subvenciones públicas, los impuestos y otras encaminadas al fomento del sector.
Las asociaciones profesionales han reclamado la «reprogramación» de las actuaciones suspendidas temporalmente, el pago anticipado de al menos una parte de las actuaciones aplazadas y la ejecución íntegra del presupuesto de gasto en artes escénicas consignado por parte de las diferentes Administraciones públicas para este ejercicio 2020.
Asimismo, han exigido la revisión y modificación de los programas que impulsan las redes autonómicas de exhibición y PLATEA, el abono inmediato de las facturas de servicios prestados, la formalización de las actuaciones aplazadas y una aclaración sobre la extensión del «concepto de fuerza mayor en los contratos públicos».
De forma complementaria, consideran vital «permitir la compensación por pérdida a las empresas y profesionales autónomos del sector artístico sin tener que acreditar una reducción significativa».
En este contexto, han propuesto el acceso al subsidio por desempleo para aquellos trabajadores de la cultura que acrediten, al menos, la realización de 20 actuaciones en el último año y/o que acrediten una cotización en el plazo de los últimos seis años o desde la última solicitud de alguna prestación de desempleo, equivalente a 80 días cotizados en alta o alta asimilada.
Además, ha reclamado que se tenga en cuenta que se trata de «un sector estratégico para el Estado», por lo que proponen el acceso a líneas de crédito oficial en condiciones ventajosas; la apertura de fondos para cubrir la falta de ingresos, los perjuicios económicos causados por las cancelaciones, el lucro cesante o el pago de préstamos; decretar una demora de los pagos de los préstamos de las empresas y profesionales vinculados a las Artes Escénicas y la Música, sin intereses de penalización; y la creación de canales de información administrativa sobre nuevos sistemas de financiación no usados por el sector cultural.
«La situación actual quiebra cualquier previsión que se hubiera realizado no solo de las actividades subvencionadas sino también de la presentación de las justificaciones de las ejecutadas en el ejercicio pasado», han señalado.
En este sentido, han solicitado que se «agilice» el pago de las subvenciones concedidas; que se impongan criterios de flexibilidad en las convocatorias que están actualmente en fase de ejecución y/o de justificación; un incremento de las partidas destinadas a las subvenciones públicas y que se proceda a la convocatoria de las subvenciones correspondientes a 2020 contemplando la situación actual.
En cuanto a la modificación de las convocatorias en marcha, han destacado la «necesidad» de su adecuación al contexto actual a través de diversas disposiciones, reutilizando los fondos remanentes de las ayudas a giras y a festivales para otras líneas y considerando que las funciones realizadas dentro del programa PLATEA cuenten dentro de las ayudas a gira.
Respecto a las nuevas convocatorias, han propuesto la aprobación de subvenciones específicas por el importe de lucro cesante y la creación de líneas de ayuda a la distribución de espectáculos, la dramaturgia y la composición musical y coreográfica, así como la subvención de los costes generados por los aplazamientos.
Otras de las medidas que consideran oportunas en esta situación son la reducción del IVA e IGIC en el precio de las entradas y las contrataciones artísticas; el aplazamiento de la deuda tributaria; la reducción del impuesto de sociedades; la reducción del IBI durante varios ejercicios fiscales y de las tasas de ocupación de la vía pública para las artes y los/las artistas de calle.