La Fundación SGAE organiza un encuentro sobre libertad de expresión en las artes

El director general de la Fundación SGAE, Rubén Gutiérrez, ha inaugurado este encuentro. Tras él, Hajnalka Somogyi, directora de la OFF-Biennale Budapest, firme opositora a la intervención en el arte y las ideas del gobierno ultraconservador del húngaro Viktor Orbán ha explicado la situación en su país: “Se ha establecido una oligarquía muy real y muy poderosa a través de la redistribuión de dinero público hacia las familias más cercanas al poder, mientras que las organizaciones y asociaciones civiles han sido delcaradas enemigos internos que reciben financiación de poderes externos, para desacreditar a pensadores con influencia y artistas críticos con el gobierno”. 

El encuentro ha concluido con la mesa redonda Creación artística y libertad de expresión en la que han participado una serie de artistas que han contado su propia experiencia con la censura y varios juristas y profesionales del sector. La periodista Virginia Pérez Alonso, codirectora del diario Público y presidenta de la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI), ha moderado este debate: “Hay que tener en cuenta lo que hemos avanzado. Por ejemplo, hace 40 años el estreno de La vida de Brian causó una polémica a nivel mundial y su prohibición en varios países. Y a día de hoy es imposible hablar de la historia del cine sin mencionar esta película.»

La mesa redonda ha comenzado con la intervención de María Paz García Rubio, que ha defendido que pese a que la libertad de expresión puede colisionar con otros derechos como la libertad religiosa o el honor, la artística debería tener una protección distinta y mayor respecto a otros tipos. A continuación Ignacio Gónzalez Vega ha explicado que en los últimos años «se está banalizando el delito de odio» y que «la libertad de expresión también incluye a aquellas expresiones que ofenden a otros, pues este es el ejemplo máximo de libertad y un pilar fundamental de la democracia».

César Strawberry, condenado por el Tribunal Supremo a un año de prisión por enaltecimiento del terrorsimo, ha defendido su potura hacia la libertad de opinión de esta manera: «Yo puedo ser un bocachancla y un cafre, pero es que tengo el derecho y la libertad de ser un bocachancla y un cafre». Además, ha defendido la libertad de opinión sin tener en cuenta la ideología de cada uno.

La directora y guionista Arantxa Echeverría , cuya película Carmen y Lola fue muy duramente criticada por el colectivo gitano, ha destacado la importancia cada vez mayor de la autocensura: «Hay que tener cuidado con la autorestricción de derechos que estamos creando. Yo fui la primera que con el tema que trata Carmen y Lola tenía mucho miedo a la hora de escribir el guion, porque esa autocensura ya la llevamos encima».

Por último, Alberto San Juan ha expuesto cómo considera él que deberían los artistas defenderse de los diversos ataques a la libertad de expresión que pueden sufrir: «Hay que estar preparado para todo y firmes con aquello con lo que no estemos de acuerdo: realizar una resistencia activa y defender nuestros derechos ejerciéndolos», ha concluido.