El Real Decreto 193/2023 señala las medidas que deberán tener los espacios escénicos en materia de accesibilidad, entre otros bienes y servicios a disposición del público
Medida promovida por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, por la que se regulan las condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación de las personas con discapacidad a los bienes y servicios
Esta norma, promovida por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, reserva un apartado para apuntar específicamente las medidas que deberán tomar los espacios escénicos, tanto de titularidad pública como privada.
En el artículo 23, queda establecido que ‘‘los espacios escénicos de titularidad pública instalarán en sus salas sistemas de inducción magnética y pantallas de subtitulado y audiodescripción para que las personas con discapacidad sensorial puedan acceder a los contenidos de las obras objeto de exhibición. En el caso de los espacios escénicos de titularidad privada se promoverá la progresiva incorporación de estos recursos.’’
Los bienes de titularidad pública tendrán hasta enero de 2025 para ir incorporando estas medidas. En el caso de los bienes de titularidad privada nuevos, el plazo se extiende hasta enero de 2029.
Teatro Accesible ha equipado a alrededor de 48 espacios escénicos del territorio español con sistemas de ayuda auditiva como bucle magnético individual y sonido amplificado. Siendo Cataluña la comunidad con más salas en la lista (16), seguida de la Comunidad de Madrid (9) y de Navarra (8).
El proyecto Teatro Accesible, pionero en España, lleva equipando con medidas de accesibilidad comunicativa a múltiples espacios escénicos de todo el territorio nacional desde 2011. Entre sus servicios se incluye subtitulado, audiodescripción, lengua de signos, touch-tours, bucles de inducción magnética y sonido amplificado. En sus 12 temporadas, más de 16 mil personas mayores y personas con discapacidad auditiva, discapacidad visual y discapacidad cognitiva, se han visto beneficiadas por estos servicios.
Con la aprobación de este Real Decreto, se configura como un gran avance en la garantización del acceso al derecho a la cultura en espacios escénicos y se visibiliza la necesidad de adoptar medidas para hacer de las artes escénicas y la cultura, un espacio completamente accesible.