«Rubén Olmo ha pergeñado una compañía capaz de presentar unas coreografías que valoran al creador sin perder el matiz de la innovación; de atajar la inspiración y el carácter de Antonio con unos solistas de alto rango que no juegan al factor sorpresa, sino a impactar con la chispa de la intencionalidad; de integrar la música en el movimiento, y de cautivar al público con un mosaico de fuertes emociones», han escrito. También han destacado la calidad de los bailarines: «La propuesta del BNE se puede definir como impoluta y conseguida. Cada bloque está bien definido y el espectador se deja seducir por la majestuosidad de un cuerpo de baile brillante».
Sacamos brillo a las joyas de la corona
«Hemos sacado las joyas de la corona para que brillen», contó Rubén Olmo en la presentación a los medios de comunicación de Jerez de Centenario Antonio Ruiz Soler. Acompañaron al director del Ballet Nacional de España Francisco Camas, teniente de alcaldesa del Ayuntamiento de Jerez, e Isamay Benavente, directora del Festival de Jerez. Intervinieron también en la presentación Manuel Coves, director musical del programa; Miguel Ángel Corbacho, que ha coreografiado junto a Rubén Olmo la obra Estampas flamencas; la maestra repetidora Maribel Gallardo; y la repetidora Cristina Visús. Las dos últimas se han encargado de reponer dos de las coreografías más destacadas de Antonio el Bailarín: Sonatas y Fantasía Galaica.
Antonio Ruiz Soler (1921-1996) es uno de los bailarines y coreógrafos que más han marcado la evolución de la danza española en el siglo XX. Para recordar a quien dirigió el Ballet Nacional de España entre 1980 y 1983, el Ballet Nacional de España ha diseñado, con motivo del centenario de su nacimiento, un programa que reúne montajes fieles al original de piezas clave de su trayectoria, así como creaciones inspiradas en su estilo.
Las coreografías de Antonio el Bailarín seleccionadas (Sonatas, Fantasía galaica y Zapateado de Sarasate) representan la cumbre de su talento dentro de tres estilos distintos: la escuela bolera, el folclore estilizado y la estilización del flamenco. Además, el programa recoge los palos flamencos que Antonio representó con frecuencia con su compañía a través de la visión de Rubén Olmo y Miguel Ángel Corbacho. Completa el repaso a su carrera artística el solo Leyenda, coreografía creada por Carlos Vilán para la composición Asturias, de Isaac Albéniz, otra de las piezas imprescindibles de los espectáculos de Antonio Ruiz Soler. Tampoco falta un guiño a la carrera de Antonio en el cine.
En 1952, el director Edgar Neville le pidió a Antonio que preparara algún baile original para la película Duende y misterio del flamenco. Además del primer martinete bailado, incluyó una primera versión, más reducida, de las Sonatas, con música del Padre Soler, una de sus obras de más éxito de su repertorio posterior. Esta primera versión ya dejaba apreciar que su estilo de escuela bolera no seguía los postulados de la escuela tradicional ni en los pasos de baile, ni en el braceo, los toques de palillo ni en la estética goyesca. La escuela bolera que presentó Antonio en una escenografía palaciega, con infantas, cortesanos y alabarderos, es una mezcla de bolera con danza clásica de gran complejidad técnica. Un año después, el primer programa de su compañía Antonio Ballet Español incluyó la suite completa de ocho sonatas, interpretada por toda la compañía de 35 bailarines en distintos cuadros. El estreno tuvo lugar dentro del Festival Internacional de Música y Danza de Granada, celebrado en los Jardines del Generalife.
Durante los años en los que el dúo de Rosario y Antonio vivió y actuó en Estados Unidos en la década de 1940, la pareja también participó en diversas películas musicales rodadas en Hollywood. Una de ellas fue Hollywood Canteen (1944), un espectáculo coral realizado para animar a los soldados que luchaban en la Segunda Guerra Mundial. El número para versión orquestal de la música tradicional andaluza conocida como El vito que se incluyó en esta película permite vislumbrar cómo eran los espectáculos con los que la pareja recorrió toda América: un rápido entrelazar de giros y zapateados en el que predominaba la espectacularidad sobre la técnica. Rubén Olmo ha elegido este baile como un guiño a la faceta cinematográfica de Antonio Ruiz Soler, que después continuaría en España ya como actor protagonista y no solo bailarín.
Rubén Olmo y Miguel Ángel Corbacho han creado cuatro piezas inspiradas en el estilo, la estética y el carácter de Antonio Ruiz Soler. Estas coreografías recorren el flamenco tradicional desde sus orígenes, tanto de vestuario como musicalmente. Este repaso del cante, el baile y el toque primigenios transita por los palos flamencos habituales en los trabajos de Antonio: el zorongo, el martinete, el taranto y los caracoles. Sigue la estela de la puesta en escena que utilizaba en sus montajes de flamenco, con una coreografía más actual.
Cuando Esther Jurado, bailarina principal invitada del Ballet Nacional de España, pidió a Carlos Vilán que creara para ella una coreografía de clásico español, el bailarín y coreógrafo argentino la imaginó bailando con una bata de cola la partitura Asturias de Albéniz desconociendo que su madre era asturiana. Esta coreografía, que tituló Leyenda, se estrenó en la Gala de Estrellas de la Ópera de Bucarest en 1998.
Rubén Olmo ha querido incluirla en este programa porque la composición de Albéniz era habitual en el repertorio del Ballet de Antonio, aunque en su caso lo interpretaba un bailarín masculino. Para el director del Ballet Nacional de España, esta creación de Carlos Vilán encajaba con el espíritu de este programa porque el coreógrafo conocía muy bien el estilo del maestro. Carlos Vilán trabajó estrechamente con Antonio como repetidor de La romería del Rocío, obra que María Rosa encargó a Antonio para su compañía.
La interpretación que Antonio Ruiz Soler realizó de la música de Pablo Sarasate elevó su prestigio como bailarín y coreógrafo y se convirtió en una de las joyas de su repertorio desde su estreno en 1946 en el Teatro Bellas Artes de Buenos Aires. La influencia del claqué que se aprecia en la técnica de este zapateado lo convierte en una virtuosa muestra de flamenco estilizado. En 1959, Antonio interpretó una versión de este solo andando por una carretera rural en la película Luna de miel, una coproducción hispano-británica dirigida por Michael Powell, que visualmente remite al Gene Kelly de Un americano en París. Con los años lo han bailado innumerables primeros bailarines de diversas compañías, todos ellos intentando seguir la máxima de Antonio: “Bailarlo es acariciar el suelo; hay que hablar con el suelo, no dar patadas”.
Esta coreografía sublima la estilización de las danzas populares en la que Antonio Ruiz Soler fue un maestro. En este caso, Antonio reinterpretó la muñeira gallega a través de la técnica clásica, combinando el baile coral y el paso a dos. Sin perder referencias como las vieiras y los arcos florales, trasladó el baile más popular de Galicia de la plaza de un pueblo al teatro de cualquier ciudad del mundo, haciendo visibles la armonía y la poesía de las notas de Ernesto Halffter sobre la leyenda de la Santa Compaña.
La danza española al cole
Coincidiendo con la participación del Ballet Nacional de España, llevaron los talleres pedagógicos #BNEalColeenGira a Jerez de la Frontera (Cádiz) para intentar que niños de Primaria, Secundaria y Educación Especial se enamoraran de la danza española.
Alumnos de Primaria de CEIP La INA, CEIP San Juan de Dios y CEIP Blas Infante y de Secundaria de IES Santa Isabel de Hungría, IES La Granja, IES Fernando Savater, IES Almunia, IES Padre Luis Coloma, IES Dra.Josefa de los Reyes y alumnos del CEE de Sordos y del aula específica del IES Caballero Bonald.
Impartieron los talleres Maribel Gallardo, maestra repetidora; Belén Moreno, coordinadora de Actividades Pedagógicas y Mecenazgo; y Sergio García, primer bailarín del Ballet Nacional de España.
Taller del Ballet Nacional de España con los centros educativos from Festival de Jerez Televisión on Vimeo.
Nosotras contamos
El 8 de marzo el Ballet Nacional de España, dentro de la campaña del INAEM, han querido seguir reivindicando el papel protagonista de las mujeres también en las artes escénicas y la música junto a compañeras de otras unidades del INAEM. Porque todos los días ¡nosotras contamos! ♀️? #DiaInternacionalDeLaMujer #8Marzo2022 #WeCallItIgualdad
El flamenco de Javier Barón, en directo
El viernes 11 de marzo, tuvimos la oportunidad de ver ver en directo, a las 14 horas, a través de los perfiles en las redes sociales Facebook, YouTube y Twitter del Ballet Nacional de España, una sesión de trabajo con el coreógrafo y bailaor flamenco Javier Barón. Esta retransmisión en streaming se engloba dentro de la iniciativa #BNEenMovimientoPerpetuo de divulgación online del trabajo de bailarines y coreógrafos, que en 2021 alcanzó más de 4,6 millones de visualizaciones.
“Javier Barón es uno de los artistas que mantienen el estilo del clasicismo del flamenco, con un carácter único, propio y personal, del que destaca su elegancia y naturalidad en escena, y la limpieza de su zapateado, puro y cristalino”, opina Rubén Olmo. Por este motivo, el director del Ballet Nacional de España ha invitado al bailaor y coreógrafo a remontar para el repertorio del Ballet Nacional de España la coreografía con la que ganó el premio Giraldillo de Baile en la Bienal de Flamenco de Sevilla en 1988.
“De mis soleares vengo es un baile por soleá de Alcalá, un palo flamenco reconocido como cante grande que nació en mi pueblo natal, en Alcalá de Guadaíra”, explica Javier Barón. “Para mí es un orgullo compartir mi personal estilo de baile con el elenco del Ballet Nacional de España. Enseñándoles mi forma de hacer este baile, explicándoles cómo lo siento y lo hago, espero conseguir que sea algo emocional para ellos y que sea un aprendizaje tanto para ellos como para mí”, añadió.
Próximas Giras
LOGROÑO
19 marzo 2022
Teatro Bretón
Programa: Invocación
> Comprar entradas
TORREJÓN DE ARDOZ (MADRID)
26 y 27 marzo 2022
Teatro José María Rodero
Programa: Invocación
> Venta de entradas solo en taquilla