La Compañía Nacional de Teatro Clásico coproduce por primera vez una propuesta artística originada desde la danza en sus Diálogos Contemporáneos
Mal Pelo lleva a cabo una propuesta escénica inspirada principalmente en La vida es sueño, de Calderón de la Barca, a la que enriquecen con extractos de Calderón, obra teatral de Pier Paolo Pasolini
La propuesta está dividida en tres sueños o momentos que presentan en escena a una Rosaura andrógina en busca de su libertad de identidad
En palabras de María Muñoz, codirectora artística junto con Pep Ramis de Mal Pelo, «nuestro lenguaje es el del cuerpo y no el de la palabra, aunque siempre hemos introducido la palabra como parte del lenguaje del cuerpo en nuestras creaciones como una pincelada o contrapunto de sentido. En este sentido, hacemos una lectura diferente desde nuestra disciplina y contemporaneidad de una obra como es La vida es sueño, que tantas resonancias ha tenido a lo largo del tiempo».
Mal Pelo lleva a cabo una propuesta escénica inspirada principalmente en La vida es sueño, de Calderón de la Barca, a la que enriquecen con extractos de Calderón, obra teatral de Pier Paolo Pasolini. Para ello, han creado un montaje caracterizado por la hibridación de lenguajes en el que utilizan el cuerpo, el movimiento, la palabra, la iluminación, la imagen audiovisual y un espacio sonoro rico y dinámico.
María Muñoz destaca el carácter autoficticio del montaje pues explica que «hemos construido una Rosaura a través de un imaginario y experiencias reales mías, y con la obra atravesándola».
De haber nacido se acerca a La vida es sueño desde la mirada personal de María Muñoz, eligiendo como inspiración el personaje de Rosaura, cuyo destino está marcado por unas coordenadas de conflicto a las que decide enfrentarse. A través de la simulación, lucha por encontrar su identidad más profunda y cierta. Para María Muñoz, las inquietudes y los conflictos de Rosaura «no son sino las de género y las de su determinación de atravesar los muros que contienen su identidad».
La propuesta está dividida en tres sueños o momentos que presentan en escena a una Rosaura andrógina en busca de su libertad de identidad. Pero María Muñoz resalta que este personaje comparte los caracteres de Rosaura y Segismundo. En este juego, son imprescindibles los monólogos calderonianos «que permiten adentrarse en lugares profundos del alma del personaje y que se corresponden con los solos en danza». Todo ello, lleva a Mal Pelo a crear un «lugar» simbólico habilitado para el retrato y la ficción.
Con dirección artística de María Muñoz y Pep Ramis, el montaje cuenta en el reparto con María Muñoz, con la colaboración en la dirección y audiovisuales de Leo Castro, la dirección técnica e iluminación de Luis Martí, el concepto musical y espacio sonoro de Fanny Thollot, y las grabaciones y colaboración musical de Quiteria Muñoz (soprano), Joel Bardolet (violín) y Bruno Hurtado (viola de gamba y violón).
Coproducido por la Compañía Nacional de Teatro Clásico y Mal Pelo, De haber nacido se representa, del 9 al 19 de febrero, en la Sala Tirso de Molina del Teatro de la Comedia.