Siempre hemos sabido de su admiración por Bertolt Brecht, quizá por eso haya elegido este título para su último montaje como director del Centro Dramático Nacional. De los clásicos contemporáneos es para mí, y quizá sea un poco exagerado decirlo, el Shakespeare del siglo XX. Es una cumbre como dramaturgo, como poeta y como hombre de la escena. El teatro tal y como ahora lo concebimos no se entiende sin la aportación de Bertolt Brecht. En sus obras expone con suma perspicacia las relaciones de los hombres y mujeres entre sí, es decir, hace arte analizando la sociedad y nos alerta de las dinámicas que pone en juego el poder y que muchas veces están más cerca de lo que sospechamos; la sociedad, como es el caso actual con la irrupción de las redes sociales, puede ejercer la tiranía sobre sí misma en virtud de sofisticados mecanismos de poder. De esto habla Brecht con profusión....