Después de recorrer el mundo con más de 5.000 representaciones y 5 millones de espectadores, esta producción de Theatre Properties nos invita a conocer a los Darling, una típica familia londinense de finales del siglo XIX, conformada por George, su esposa Mary, sus tres hijos: Wendy, John y Michael, y Nana, la perrita y niñera de los niños. Wendy, la mayor, es la encargada de leerles relatos a sus hermanos sobre piratas, sirenas, hadas e indios, con un personaje principal: un niño muy peculiar llamado Peter Pan, quien, sin ellos saberlo, escucha sus historias tras la ventana junto con su hada, Campanilla. Una noche, Peter pierde su sombra en la casa de los Darling. Con la excusa de intentar recuperarla, regresará e invitará a Wendy y sus hermanos al país de Nunca Jamás, su hogar, y donde nadie crecerá. Allí vivirán numerosas aventuras, conocerán a los indios y a las sirenas y terminarán por enfrentarse al rencoroso Capitán Garfio, deseoso de acabar con Peter Pan y truncar su eterna juventud y libertad.
Con una maestría única, Silvia Villaú ha condensado la riqueza narrativa del clásico, adaptándolo de manera brillante al teatro musical. Su habilidad para capturar la esencia de la historia asegura que la experiencia sea tanto divertida como emocionante, envolviendo al espectador en la magia atemporal del cuento. Sin embargo, lo más notable es cómo el libreto de Villaú resalta los valores fundamentales que han hecho perdurar esta historia a lo largo del tiempo. A través de las aventuras de los Darling y su encuentro con Peter Pan, se promueve la amistad, el trabajo en equipo, la lucha por perseguir los sueños, la valentía y la fe en lo extraordinario. Por tanto, estamos ante un espectáculo familiar con un enfoque especial en el deleite de los más pequeños. Con su encanto atemporal y su narrativa cautivadora, esta producción teatral ofrece una experiencia única para toda la familia. Desde las emocionantes aventuras hasta los personajes entrañables, cada elemento de la obra está diseñado para capturar la imaginación de los niños y transportarlos a un mundo de fantasía y diversión.
La dirección a cargo de Tomás Padilla y la dirección artística de Silvia Villaú son la columna vertebral del proyecto. Este productor, con una vasta experiencia en el teatro musical y dominio técnico, aporta un enfoque magistral a la dirección, asegurando que cada aspecto de la obra fluya armoniosamente. Desde la puesta en escena, la coordinación del elenco, hasta el ritmo de las actuaciones, Padilla imprime una energía dinámica que cautiva al público desde el primer momento hasta el emocionante desenlace. Cabe destacar el notable esfuerzo realizado para integrar al público en el espectáculo e interactuar con ellos. Ya sea a través de diálogos directos con los personajes, momentos de complicidad o incluso participación en juegos y coreografías, se establece una conexión entre el escenario y la audiencia. Esta interacción no solo añade un elemento de diversión y sorpresa, sino que también crea una experiencia teatral aún más inmersiva y memorable para todos los presentes.
Por su parte, Silvia Villaú brinda una dirección artística impecable que enriquece la narrativa visual de la obra. Con una sensibilidad única para el diseño escénico y un aprovechamiento exquisito con juegos de alturas incorporados, Villaú recrea los mágicos escenarios de la historia, desde la pintoresca casa de los Darling en Londres hasta el fascinante mundo de Nunca Jamás, con barco incluido. Su meticulosa atención a los detalles, combinada con su creatividad innata y experiencia en el género musical, da vida a cada elemento visual de la producción que transporta al espectador a un mundo de fantasía y aventura. Las escenas donde los protagonistas vuelan sobre el escenario son verdaderamente asombrosas y constituyen uno de los momentos más destacados, agregando un toque de magia y maravilla a la experiencia teatral.
La música y letras a cargo de Pablo Pinilla, Lara Pinilla, Pablo Cruz y César Belda son verdaderamente pegadizas y están pensadas para divertir al público. Cada canción está meticulosamente diseñada para transmitir emoción, energía y capturar perfectamente el espíritu aventurero y mágico de la historia de Peter Pan. Sin embargo, debo admitir que me costó un encontrar un leitmotiv reconocible o una coherencia musical en la producción. El balance entre las frases recitadas y cantadas es adecuado. El texto proporciona continuidad al relato y conduce la historia de manera fluida y entretenida. Por otro lado, las canciones permiten a los protagonistas expresar sus sentimientos de una manera más íntima y directa, ayudados por el trabajo coreográfico de José Félix Romero y Silvia Villaú. Las llamativas y eficaces coreografías se integran perfectamente en la narrativa, sirviendo como acompañamiento visual a la historia y realzando los momentos clave con performances específicas.
Dentro del reparto, cada miembro del elenco aporta su talento y dedicación para dar vida a los entrañables personajes de la historia. Por increíble que parezca, Silvia Villaú se desdobla de su faceta de directora y productora y encarna a Peter Pan de manera divertida y con una alegría arrolladora. Con su encanto juguetón y su energía desbordante, Villaú logra infundir al personaje un sentido del humor contagioso que hace reír a toda la audiencia. Su capacidad para incorporar momentos cómicos y situaciones traviesas en su actuación hace que cada escena sea aún más entretenida y vibrante. Por su parte, Vanesa Fernández en el papel de Wendy, firma una de las mejores actuaciones del espectáculo. Pone el listón más alto con su talento vocal y sus agudos, con solos maravillosos; también muestra su delicadeza y bonhomía en el papel de madre improvisada de los Niños Perdidos. Casi sin despegarse, le acompañan Carlota Sájara, como el hermano inteligente y protector, y el pequeño y tierno Carlos González como Michael, el menor de los tres.
El temido Capitán Garfio es interpretado de forma magistral por Carlos J. Benito, demostrando su maestría y larga trayectoria en el mundo de los musicales pues, a su vez, es el encargado de trabajar con sus compañeros la calidad y la precisión vocal de las interpretaciones. Con una presencia imponente y una voz potente, Benito encarna a la perfección la malicia y el carisma del infame pirata. Además, su habilidad para combinar su voz con una vis cómica excepcional agrega una dimensión extra al personaje, haciendo que sus momentos en el escenario sean tanto intimidantes como divertidos.
Por su presencia en la historia como narradora y madre de los niños, cabe mencionar el trabajo de Ángels Jiménez. Esta actriz y cantante curtida en el teatro musical despliega su talento vocal combinado con una delicadeza en su actuación. El resto del reparto, compuesto en su mayoría por talentosos jóvenes, aporta una vitalidad única, tanto como representantes de los Niños Perdidos, con la libertad y la camaradería que caracterizan a estos intrépidos aventureros, como de la tripulación de piratas, siendo condescendientes con su capitán. En definitiva, tanto su actuación como la obra en su conjunto, es un homenaje al poder del teatro para transportarnos a mundos de fantasía y mantener viva la magia de la infancia.
Con un elenco vibrante, una dirección creativa y una dosis de magia teatral, Peter, El Musical nos invita a volar más allá de la imaginación a mundo de aventuras, risas y emociones donde el espíritu de la niñez nunca muere.
Producción: Theatre Properties, Atresmedia y Eventix
Dirección: Tomás Padilla
Dirección Artística: Silvia Villaú
Libreto: Silvia Villaú
Director Vocal: Carlos J. Benito
Reparto: Silvia Villaú, Carlos J. Benito, Vanesa Fernández, Ángels Jiménez, Laura Muriel, Jesús Lara, Francisco Hilario, Carlota Sájara, Carlos González, Naiara Cabanillas, Carlota L’Hotellerie, Antonio Mañas, Lucía Riccioli, Ester Carbonero, Clara Herrera y Darío Lema
Coreografía: José Félix Romero / Silvia Villaú
Música y Letras: Pablo Pinilla, Lara Pinilla, Pablo Cruz, César Belda
Diseño Escenografía, Iluminación y Sonido: Tomás Padilla
Diseño Vestuario: Juan Sebastián / Silvia Villaú
Diseño Escenografía: Tomás Padilla, Silvia Villaú
Construcción Escenografía: Grupo Eventix