Masescena - Otras disciplinas

AÑO VII  Número 319

27 SEPTIEMBRE 2023

Naves del Español en Matadero, espacio del Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, inaugura el sábado 11 de marzo la tercera edición del ciclo Vividero, un espacio familiar multidisciplinar compuesto por tres espectáculos y un taller pensados para disfrutar en familia con los más pequeños, y que estará en cartel todos los fines de semanahasta el 2 de abril en la sala Hormigón.

“Por favor, desconecta tu teléfono, será solo por un rato. Hazlo por la gente de tu alrededor y por ti. Basta de tantos inputs, de tanta información y de tanta prisa. Todo lo que estés viendo, por malo que sea, déjalo atrás e intenta que la emoción vaya por delante de la razón. Deja a tu adulto atrás. Vamos a parar y a vivir el momento”. 

Esta mañana, La Villarroel ha acogido la presentación de Scratch, una obra en forma de monólogo teatral escrito por Daniel J. Meyer, dirigida por Montse Rodríguez Clusella y protagonizada por Clara Mingueza. Es una producción de Aka Teatro S.L y Grec Festival de Barcelona. A la rueda de prensa, asistieron Tania Brenlle, directora artística de La Villarroel y la compañía.

Vaga y Maleanta es un espectáculo clandestino, ácido y gamberro de la madrileña compañía Oniria Teatro, una bocanada de aire fresco que evoca esa escena clandestina española de la segunda mitad del siglo XX, para dar visibilidad a la historia y al pasado de nuestros mayores LGTBIQ+. Se trata de un espectáculo de variedades en el que la música original, la improvisación y el humor negro son los ingredientes principales, todos ellos de la mano (y de la barba) de Kiki Morgan como maestra de ceremonias. Esta travesti absurda, cáustica, sicalíptica y sin pelos en la lengua nos llevará a conocer la época en la que la Ley de Vagos y Maleantes (que posteriormente se convirtió en la Ley de Peligrosidad Social) estaba vigente.

Las Hermanas Gestring (Laura Morales y Greta García, también conocidas como Aletra y Virtue) han vuelto a la vida para devolver la luz y la magia a nuestra existencia. Sacrificaron sus cabezas ante Hades y cantaron sobre su propia tumba para ser devoradas por una medusa de la Isla mágica de Eivissa. De aquella muerte ha pasado ya tiempo, un tiempo en el que han viajado a lo más hondo del alma humana para conocer lo que el mundo necesita, se han mirado al espejo buscando la esencia de su mensaje para sublimarlo en la nueva creación que nos ofrecen. Ahora, por fin, cantando, han resucitado 3 años y 18 días después (les ha costado un poquito más que a Dios) en HACER AMOR, su última propuesta y con la que celebran sus 10 años de trayectoria

La recuperación del rico patrimonio musical latinoamericano y europeo descubre a los espectadores del FIAS (Festival Internacional de Arte Sacro), un universo artístico poco conocido. Nombres anónimos del Nuevo Mundo o españoles como el sevillano Manuel García o el italiano Antonio Zacara toman el protagonismo de la segunda semana del festival que organiza la Comunidad de Madrid y cuyos conciertos se celebran en su mayoría en la Basílica Pontificia de San Miguel.

Han pasado casi 20 años desde los atentados del 11 de marzo de 2004. El nombre de Atocha es el primero que se viene a la mente cuando se recuerda aquella fecha, pero entre los puntos negros de los trayectos de aquella mañana está Santa Eugenia. Un barrio a las afueras de Madrid que tras vivir una de las explosiones en sus propias vías, hoy está casi olvidado del imaginario colectivo.  Inés ColladoInés González Cristina Marín-Miró eran unas niñas cuando se dio aquella catástrofe, una vez adultas descubren este lugar que ha transformado el dolor en reparación y la adversidad en comunidad. Con Santa Eugenia invitan al que participe en ella a adentrarse en un barrio lleno de vida y a preguntarse: “¿Qué estaba haciendo yo aquella mañana del 2004? ¿Cómo hubiera superado yo el atentado si hubiera sido un vecino más de este barrio en aquel once de marzo?”

En una sociedad obsesionada con el éxito, el payaso se ve como el perdedor. Como una persona fracasada, torpe. Sobrepasada por tanta exigencia de productividad. Así que su presencia nos humaniza, reivindica nuestra fragilidad, nos conmueve. No digan que no es para ponerse muy a su favor. Aunque, para el poeta y actor Pepe Viyuela, esa figura también es sinónimo de éxito: el que le dio aquel personaje estrepitoso que se enredaba en unas escaleras. Lo creó para poder navegar solo, ante el desafío que supone entrar en una compañía y permanecer en ella. Por primera vez lo representó en la Sala Triángulo, hoy ya cerrada y en cuyas instalaciones se ubica ahora el Teatro del Barrio. Y a este escenario vuelve, el sábado 4 de marzo, con su icono. Será en el espectáculo unipersonal Encerrona, que dirige Elena González.

La Ópera de Frankfurt, sede de la compañía Oper Frankfurt y la Frankfurter Museumsorchester, contará con el debut del director español Ramón Tebar dirigiendo Francesca da Rimini, de Saverio Mercadante, en una nueva producción de Hans Walter Richter y un reparto de voces como Jessica Pratt, Kelsey Lauritano, Theo Lebow, Erik van Heyningen, Karolina Bengtsson y Brian Michael Moore.