Seguramente el autor toledano, Francisco de Rojas Zorrilla, conociera la existencia de la tragedia de William Shakespeare ‘Romeo y Julieta’ publicada en torno a 1597. Puede que varias ediciones pudieran llegar a España antes de 1937, y el autor nacional estrenó la obra allá por 1940. Puede que Rojas Zorrilla hiciera un versión descafeinada de la famosa tragedia del inglés. La gran apuesta temática del conflicto entre familias y el enamoramiento de los más jóvenes de ambas sagas con la correspondiente oposición de los padres a ese amor imposible.
Los bandos de Verona, que se ha podido disfrutar este fin de semana en Almagro, ha contado con la coproducción de entidades públicas y privadas. En palabras del autor de la versión y productor, Eduardo Galán: «La labor de rescatar excelentes textos teatrales de nuestro Siglo de Oro debiera ser tarea propia de los poderes públicos. En esta ocasión y gracias al apoyo del Festival Iberoamericano del Siglo de Oro Clásicos en Alcalá (Comunidad de Madrid), nos hemos podido arriesgar en tan necesaria y fantástica tarea desde la iniciativa privada. Así pues, el público podrá disfrutar de una comedia áurea que no se representaba desde los tiempos de su autor en el siglo XVII. No obstante, me siento orgulloso de haber rescatado Los bandos de Verona, comedia muy divertida de capa y espada escrita por el toledano Rojas Zorrilla sobre la leyenda y narración del siglo XVI de la historia de Píramo y Tisbe, la misma en la que se inspiró Shakespeare para su Romeo y Julieta. Agradezco a Irene Pardo (actual directora del Festival de Almagro) haberme dado a conocer Los bandos de Verona y haberme animado a adaptarla y a producirla.
Ha sido un placer trabajar con este texto. Me he limitado a cortar algunas largas parrafadas, a distribuir entre varios personajes los largos parlamentos, a incluir algunos versos de enlace y a potenciar la trama graciosa de los enredos de una comedia que persigue ante todo entretener, divertir y hacer reír. Agradezco a nuestro director, Daniel Alonso de Santos, quien ha contribuido con su mano experta a mejorar esta adaptación, revisando la métrica, incorporando gags, puliendo, en fin, engrandeciendo la comedia».
Después de conocer las palabras del autor de la versión, que ha sido dirigida por Daniel Alonso de Santos, entenderemos que lo que hemos podido ver en escena ha sido una comedia de enredo, una grotesca comedia, con grandes notas de humor, utilizando, en ocasiones a sus personajes, para arrancar la risa del público.
El reparto ha contado con varias caras conocidas, como es el caso de Canco Rodríguez, por su participación en la conocida serie de TV ‘Aída’, y Jean Cruz, actor de reparto de la serie de TV ‘La cocinera de Castamar’, entre otros muchos trabajos. El papel de Julia es interpretado por Elisabet Altube, joven actriz de gran talento que hace no mucho se ponía a las órdenes de la homenajeada por el Festival de Almagro de este año, Laila Ripoll, para interpretar uno de los personajes de su exitosa «Tea Rooms».
La puesta en escena de la obra en cuanto a su escenografía nos presenta cuatro plataformas en las que se ubica un panel de color blanco. Unas en formato vertical y otras en horizontal. Una de las plataformas, con el panel central giratorio, sirve las veces de puerta y otras de pantalla de proyección. La función comienza con la proyección de un video donde se presentan los personajes, y entre escenas se proyectas obras de arte. Además, al inicio de la obra hay un pequeño guiño a la ciudad italiana de Verona, cuando se dan instrucciones desde la sala en idioma italiano.
Una función para pasar una buena jornada, y así lo premió el público, pero no pasará a formar parte de nuestro recuerdo por habernos impactado en algún momento.