La prestigiosa compañía Títeres Etcétera, Premio Nacional de Teatro para la Infancia y la Juventud, presenta Soñando el carnaval de los animales
Coproducida por el Gran Teatre del Liceu, la obra plantea un universo onírico repleto de humor, música y poesía para toda la familia
El espectáculo musical con títeres de grandes dimensiones adapta las obras de Claude Debussy y de Camille Saint-Saëns
El espectáculo, que adapta las obras Preludio a la siesta de un fauno de Claude Debussy, y El carnaval de los animales de Camille Saint-Saëns, arranca con “el ritual” previo a un concierto. “Los once músicos llegan con sus abrigos y bolsos. Ante la mirada de los espectadores arman sus instrumentos, afinan, calientan, charlan… A partir de esas acciones cotidianas se pasa poco a poco a lo irreal” relata su director, Enrique Lanz.
Soñando el carnaval de los animales encadena sorpresas sin más lógica que la de los sueños, sin más argumento que la propia música y un montón de animales espectaculares para potenciar el arte de disfrutar observando. Destinado a un público familiar, la edad recomendada es a partir de tres años.
La música, interpretada en directo por Murtra Ensemble, guía la obra a través de mundos de fantasía, dando lugar a la aparición de imágenes sorprendentes como un Tiranosaurio Rex de 12 metros de ancho, un elefante africano de 3 metros de altura, una tortuga gigante paseando a un músico en su caparazón o un acuario por todo el escenario que da la sensación de estar en las profundidades oceánicas.
Las funciones de Soñando el carnaval de los animales tendrán lugar en el Teatro Principal de Valencia y forman parte de la programación del Teatro Escalante.
Títeres Etcétera
Compañía fundada en 1981 en Granada, por Enrique Lanz y Fabiola Garrido. La excelencia y versatilidad de su trabajo la han convertido en un referente de calidad dentro del teatro contemporáneo español por su rigor y vanguardia. Etcétera ha estrenado diferentes espectáculos entre los que destacan: Sypnosis (1985), Trans(1990), Pedro y el lobo (1997), La serva padrona (1998), Historia de Babar el elefantito (2001), Soñando el carnaval de los animales (2004), El retablo de maese Pedro (2009), La caja de los juguetes (2009), El alma del pueblo (2013), El sastrecillo valiente (2013) y Totolín -entredós- (2019).
Estas creaciones se han presentado en los más importantes festivales de títeres y música a nivel internacional, viajando por una treintena de países, actuando además en los teatros de mayor renombre de la escena española. El trabajo de Etcétera se podría identificar por la escenificación de obras musicales con títeres para todos los públicos. La compañía es líder en España en este género, y con su obra ha abierto la puerta de grandes teatros y festivales que ahora acogen a los títeres en sus programaciones. Etcétera ha allanado así el camino a muchas compañías que siguen sus pasos, siendo escuela y cantera de numerosos titiriteros en Granada.
La poesía de sus espectáculos, la concienzuda búsqueda estética para crear los títeres, la innovación técnica y la investigación continua como motor son los ejes de todos los proyectos. Cada espectáculo es voluntariamente diferente en estética y técnica a los anteriores, y que la renovación sea permanente, por lo que el I+D+i deviene una práctica habitual.
Entre sus misiones se encuentra también la investigación, documentación y difusión del teatro de títeres tradicional y contemporáneo. Entre junio de 2012 y agosto de 2014 la exposición Títeres. 30 años de Etcétera, en el Parque de las Ciencias de Granada, mostró una antología de sus tres primeras décadas de trabajo. La muestra fue visitada por cerca de 800.000 personas.
En 2014, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte le otorgó el Premio Nacional de Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud por “la calidad y la innovación de sus creaciones a lo largo de una amplia trayectoria en el ámbito del títere tradicional y contemporáneo”. En 2017 el Ayuntamiento de Granada le concedió el Premio al Prestigio Turístico Nacional, por “poner en valor el género de obras con títeres y a su vez innovar la tradición familiar, siendo embajadores de Granada por todo el país”. También en 2017 recibió el Premio Galicreques que concede el festival de Santiago de Compostela a “una entidad, persona o compañía por su labor en el mundo de los títeres a través de proyectos que, aunque en su comienzo pudieran parecer descabellados y efímeros, acabaron siendo sueños conseguidos que nos favorecen a todos los amantes de las marionetas.”