El musicólogo Álvaro Torrente ha sido el encargado de recuperar la partitura original de esta ópera, compuesta por el italiano Francesco Corselli, quien vivió en España durante cuatro décadas y trabajó en suelo español «durante la mayor parte de la carrera» y que, a pesar de ello, su obra no fue considerada por muchos «música española». Según ha señalado, la principal causa de este olvido es que «muchos consideran que una ópera en lengua italiana, de un compositor italiano, aunque se haya estrenado en Madrid, no es música española».
«Estamos recuperando material musical español, de la misma manera que El Greco es un pintor español», ha reivindicado Torrente, quien achaca el olvido de esta ópera al «nacionalismo» en España durante el siglo XIX, que consideraba lo italiano como «invasión» y que cree que está «superado» desde hace varias décadas.
El director musical del Teatro Real, Ivor Bolton, estará al frente de dos elencos, del Coro Titular del Teatro Real y de la Orquesta Barroca de Sevilla, además de interpretar el clavecín, mientras Mariame Clément es la reponsable de la puesta en escena de esta ópera. Su estreno tuvo lugar en 1744 en el Coliseo del Buen Retiro de Madrid para festejar el enlace de la infanta María Teresa Rafaela de España, hija de Felipe V.
Bolton ha celebrado la recuperación de esta ópera, que se estrena en un periodo, el que discurre entre 1730 y 1770, en el que hay «grandes lagunas en la vida operística». Del mismo modo, el director artístico del Teatro Real, Joan Matabosch, ha hablado de un «acontecimiento importante» con la «recuperación de una de las grandes obras del barroco español».
Esta ópera, una «tragicomedia» con libreto de Pietro Metastasio, está «llena de malentendidos, cambios de género y travestismos», en palabras de Clément. En ella, el héroe Aquiles se oculta en una isla disfrazado de mujer para huir de la guerra de Troya. Allí se enamora de la princesa, pero su prometido también se fija en Aquiles, que como mujer guarda gran «atractivo».
Preguntada a acerca de si se trata de una «ópera queer», Clément ha señalado que la «confusión» y el juego con la «ambigüedad» es importante en esta ópera, al tiempo que ha destacado que el «travestismo» está en «todos los compositores» del momento, entre los que cita a Monteverdi o Cavalli, hasta que se introdujo una «normalización» en los siglos XVIII y XIX.
El coronavirus no frena la venta de entradas
En cuanto al efecto del coronavirus en el Teatro Real, el director general del coliseo madrileño, Ignacio García-Belenguer, ha señalado que no tienen «constancia de ningún trabajador» que padezca el virus y ha señalado que están siguiendo las instrucciones que dictó el Ministerio de Presidencia sobre las recomendaciones de «higiene y limpieza» y que están siguiendo las «medidas preventivas» de los ministerios de Sanidad y de Trabajo.
Respecto al efecto del coronavirus en la venta de entradas, el director general del Teatro Real ha señalado que no se ha notado el impacto. En el caso de ‘La Valkiria’ y ‘La flauta mágica’, los «índices de venta» han sido «excelentes», incluso «por encima de la media», con una ocupación que ha alcanzado el cien por cien en algunas funciones.
Por otro lado, preguntado por el «impacto» de la cancelación de las actuaciones de Plácido Domingo en el Teatro Real, donde tenía previsto actuar en cinco funciones de ‘La traviata’ los días 9 y 13 de mayo, García-Belenguer ha señalado que el Teatro Real tiene el mismo «criterio» que «cuando se produce el cambio de cualquier otro cantante en el reparto».
«El criterio del Teatro Real siempre ha sido el mismo por un tema de respeto a todos los cantantes, igual que si se produce una cancelación por enfermedad. El impacto es el mismo, nuestro trato es igualitario porque entendemos que la ópera es un sentido global, no un recital de un determinado cantante, por lo tanto hay continuidad con lo que estaba previsto», ha dicho.