La artista sanluqueña y el dúo que forman Manuel Ángel Rojas y Antonio Ortiz tejen su espectáculo del 8 de diciembre con el flamenco más ortodoxo y los matices más contemporáneos de la música electrónica
Con La llave de Ágora, la cantaora sanluqueña Laura Vital pone voz al proyecto Ágora de Manuel Ángel Rojas (guitarrista y productor) y Antonio Ortiz (pianista), autores de la idea original y de la composición musical del espectáculo. Este lleva el mismo título del primer disco que el dúo de músicos ha lanzado este mismo año, y en el que la propia Vital ha colaborado junto a otros 18 artistas.
Las raíces del flamenco, su expresión ortodoxa y las corrientes musicales de vanguardia convergen en La llave de Ágora, un viaje que se sumerge en el cante más tradicional y se entrelaza con los matices electrónicos más contemporáneos para crear una experiencia sonora única y enriquecedora.
La percusión electrónica dialoga por bulería y soleá, mientras que los sintetizadores dan vida a texturas clásicas del flamenco. En este juego musical, sus intérpretes exploran lo desconocido abriéndose a nuevas sonoridades y horizontes.
Vital, que recibió el premio Flamenco Hoy de la crítica flamenca al mejor disco revelación de cante por Tejiendo lunas, sale así de su zona de confort, tras una trayectoria en la que ha alternado producciones propias como Mujeres de sal y Flamenco con nombre de mujer, y en otras ajenas, compartiendo escenario con figuras como José Menese, Enrique de Melchor, Vicente Amigo, Carmen Linares, José Mercé, Miguel Poveda y con artistas de otros géneros como Bono de U2 y Teresa Berganza.
La cantaora ha sabido buscar la complicidad de Ágora, cuyos fundadores interpretan al piano (Ortiz) y a los sintetizadores, secuencias y guitarra flamenca (Rojas) los temas de La llave de Ágora, que no olvida homenajear a las reinas del gipsy rock Las Grecas. Ortiz estudió piano y composición en el Conservatorio Superior de Música Manuel Castillo, y amplió su formación en Italia y Alemania. Su interés por la música mediterránea y oriental lo llevó a estudiar en Israel y explorar sonidos en Marruecos, Túnez, Jordania y Grecia. También se ha formado en el jazz y la improvisación. En 2016, estrenó su espectáculo Viento y metal.
Rojas se formó en los conservatorios Cristóbal de Morales y Rafael Orozco. A lo largo de su carrera, ha trabajado con artistas influyentes como Lole Montoya, El Pele, Mercedes de Córdoba, Makarines, Marisol Bizcocho e Ismael Lora. En 2018 lanzó su primer álbum en solitario como guitarrista flamenco, Fuente del tiempo.
El bailaor Rafael Ramírez, Primer Premio Desplante Masculino en el Festival de Cante de las Minas (2021) y Premio Artista Revelación del Festival de Jerez (2023) entre otros galardones, estrena en la Comunidad de Madrid dentro de Miradas Flamenkas Lo preciso, un espectáculo que le llevó el pasado año por Estados Unidos. En él fusiona la raíz con la vanguardia a través de su forma sofisticada de entender el baile flamenco.
Esta es la obra más reciente del bailaor andaluz nacido en Estepona en 1993. A los 20 años actuó con su propia compañía en la Bienal Flamenca de Sevilla y se integró en otras como la de Carmen Mota y Antonio Andrade, recorriendo países como China, Rusia, Francia, Alemania, Rumanía, México, Israel… y festivales como el de Jerez, Nimes y Suma Flamenca asistieron a su baile a partir de los 22 años. Además de Lo preciso y Entorno, cuenta con otras producciones propias como Romances del pasado, Toques en mi conciencia y Malagueando.
Durante la exitosa gira estadounidense de Lo Preciso, Ramírez logró el premio al Mejor espectáculo de danza en Miami. El artista andaluz y su compañía bailan en escena en torno a la idea de perfección, “utópica y efímera”, según el bailarín, como un modo de realizarse.