Fernanda Orazi y Emilio Tomé son los intérpretes de esta historia sobre una pareja en la que las palabras son las auténticas protagonistas
Se trata de una pieza reescrita a partir de la original de 2017 para la que el autor disfrutó de una residencia de escritura en la Sala Beckett
La idea es que la obra “permanezca siempre viva”, en palabras de Remón
Barbados 2022 es una ampliación y una relectura de una obra anterior: Barbados, etcétera (2017). Tiene el mismo punto de partida y la ejecutan los mismos actores. Pero, como dijo el filósofo Heráclito hace 25 siglos, nadie se baña dos veces en el mismo río. El tiempo hace su trabajo sobre el texto, los intérpretes y la obra en su conjunto. La idea de Pablo Remón es reescribir la obra cada cinco años, y la razón de esta apuesta utópica es “hacerla permanecer siempre viva”, según el autor.
Después del éxito fulgurante de su última pieza, Los farsantes, el dramaturgo, guionista de cine y director Pablo Remón, que en 2013 fundó la compañía La abducción, mira hacia atrás para tomar impulso. Ni él ni sus actores, Fernanda Orazi y Emilio Tomé, son los mismos cinco años después. Y de eso se trata. Porque a veces, afirma Remón, “la misma historia vivida por dos personas, al contarla cada uno, ¡no coincide! Intentémoslo de nuevo. Volvamos a contarnos. Busquémosle la claridad a la nebulosa del recuerdo. Cada vez que se cuenta, varía, como una pieza de Bach. Cada vez que se cuenta, se altera el orden de los episodios. ¿Cómo comunicarse en pareja si la memoria nos juega estas malas pasadas? La respuesta está en Barbados”, concluye.