Sinopsis
Nilo es un actor mediocre al que ya no dan trabajo. Su mujer le ha dejado y él entra en una espiral de pensamientos auto destructivos.Gracias a Walrus, un nadador experto que oculta un trauma familiar, Nilo aprenderá a nadar a los 48 años, y en ese proceso también recibirá la lección más importante de su vida.
«El nadador de aguas abiertas» es un relato cautivador. Dos vidas “fortuitamente” enredadas por el mar y, en la orilla, la amistad ejerciendo de literal salvavidas…
«Esta comedia dramática, es una preciosa historia de amistad masculina muy diferente a las tópicas que la ficción nos suele mostrar: tierna, amorosa, empática. Nilo (un Markos Marín totalmente entregado) y Walrus (un Adolfo Fernández absoluto maestro en recursos y registros, pues además va saltando de papel en papel para dar vida a varios secundarios -todos, desde la caricatura tronchante-).
Divertida y a la vez profunda, con múltiples guiños al público que rompen la cuarta pared y, lejos de arruinar el momento, acercan más aún la historia al patio de butacas. La dirección y, sobre todo, la puesta en escena (ambas de Fernando Bernués) están pensadísimas -y logradísimas- para que una
historia que se desarrolla básicamente en el agua, en el mar, funcione y se ‘visualice’ sobre un escenario (por no hablar de cómo recrean la piscina en la que Nilo da sus primeras brazadas -¡bravo!-). La música (épica en las travesías marinas) y el espacio sonoro son del reputado Fernando Velázquez, y la adaptación del libro a guión teatral la firma María Goiricelaya cuya «Yerma» obtuvo el Premio Max 2023 a la mejor adaptación».
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