La obra explora de forma divertida los dilemas del psicoanálisis y los roles de género en la sociedad americana, a la vez que refleja las tensiones de una época marcada por los cambios sociales
La dirección de Josete Corral realza la crítica social y el humor conectando pasado y presente
Ana Ruth Resco en el papel de Henrietta, Ede como Mabel y Luis Heras como Stephen dan vida a los personajes de esta hilarante comedia
Más de un siglo después de su estreno, Deseos reprimidos revela la vigencia de Susan Glaspell en el teatro contemporáneo
Estamos ante una pieza que muestra otra faceta más de la autora de Bernice. Glaspell emplea aquí la comedia para cuestionar el fervor por las teorías freudianas en la sociedad americana de principios del siglo XX. La obra, estructurada en un solo acto, explora con humor cómo estas ideas afectan al matrimonio Brewster y su hermana Mabel, quienes, al revelar sus deseos más ocultos, se ven envueltos en una serie de situaciones disparatadas. Así, Deseos reprimidos plantea una sátira social en torno al choque entre los valores tradicionales y el auge creciente del psicoanálisis.
En el reparto, Ana Ruth Resco en el papel de Henrietta, Ede como Mabel y Luis Heras como Stephen dan vida a los personajes bajo la dirección de Josete Corral. Juntos aportan matices de humor y profundidad a una obra que invita al público a reflexionar sobre los deseos reprimidos y las complejidades de las relaciones familiares. En palabras de Josete Corral, “el humor de Glaspell y su mirada crítica sobre la sociedad nos recuerdan que, a pesar del paso del tiempo, seguimos enfrentándonos a los mismos dilemas personales y culturales”.
El equipo creativo cuenta con la escenografía e iluminación de Víctor Longás, quien aporta una estética conceptual y minimalista, realzando la fuerza de un texto que, un siglo después sigue desafiando convenciones y explorando la naturaleza humana.
Deseos reprimidos es una de las piezas clave en la trayectoria de Glaspell, cuya obra, redescubierta a finales del siglo XX, es considerada hoy esencial para comprender la evolución del teatro y de la literatura feminista.
Esta producción sigue al rotundo éxito en el Teatro Español de La lámpara maravillosa, obra que agotó entradas todos los días.
El espectáculo se incluye dentro del programa JOBO, Joven Bono Cultural, para jóvenes entre 16 y 26 años.