Miguel del Arco y Antonio Rojano adaptan libremente a nuestro tiempo este clásico de Shakespeare en una versión libre dirigida por Del Arco que confiere más entidad a los personajes que rodean a Ricardo y potencia algo muy presente en el original: la comedia.
Ricardo arranca carcajadas, pero la risa tiene un regusto helado porque su humor es el mismo que el de esa clase dirigente que mira sin empatía ninguna el mundo que pretende gobernar. El humor sobre el que se construye un mundo sin atisbo de bondad.
Israel Elejalde es finalista al XIV Premios Valle-Inclán de Teatro por su trabajo en Ricardo III.
Esta propuesta se suma a la oferta de museos y espacios culturales y de ocio de la ciudad que mantienen sus puertas abiertas estos días.