Tras una residencia artística de varios meses de duración en Teatro del Barrio, Los Torreznos estrenaron su espectáculo más reciente, La gente, en el pasado Festival Surge. Ahora traen de nuevo a Teatro del Barrio el 18 de abril y el 11 de mayo esta performance que se pregunta a qué nos referimos cuando hablamos de la gente.
¿Pensar en la gente cómo un ente abstracto y ajeno o cómo una entidad colectiva a la que pertenecemos? Entender a la gente como una masa homogénea, es un grave error. ¿Es posible hablar, trabajar, comunicarse con grupos de gentes de distintas capas sociales? ¿Qué tipo de conexión establecemos con ellos?
¡Viva la gente!
Sobre Los Torreznos
Inicialmente, Los Torreznos se lanzaron a investigar, en espacios asociados al arte contemporáneo (museos, galerías…), lo social, lo político y las costumbres más arraigadas, recurriendo al humor absurdo y al juego con el lenguaje. “La acción -lo que ahora se llama performance– fue y es nuestro elemento de creación natural. La performance no contempla en su eje al público como un elemento fundamental que tener en cuenta. Es más, durante mucho tiempo -gran parte de los años 60 y 70- lo ha despreciado, ninguneado, eludido, sorteado, también aburrido”.
Sin embargo, y contra lo que pudiera pensarse, “en estos últimos diez años hemos empezado a tener en cuenta mucho más al público -sinceramente nunca lo hemos despreciado radicalmente-, entre otras razonas, por hacer cada vez más trabajos en contextos teatrales”.
En esa senda, el Teatro del Barrio ha sido determinante en la trayectoria de Los Torreznos. “Nos permite convivir con un público de nuestra ciudad de manera mucho más continuada y regularizada. También nos ayuda a entender más a fondo lo que implica un marco teatral de recepción”. Los ubica en un entorno artístico, el teatral, que inicialmente les resultó algo ajeno, aunque en ningún caso hostil: “por un lado, nosotros no interpretamos, no encarnamos a nadie, no dejamos nunca de ser nosotros. No hay ficción, solo nos colocamos en una situación. En una hipótesis”.
Y por otro lado, recuperando una inspiración de la performance más clásica, Los Torreznos quieren medir la resistencia del público: “Hemos hecho obras que consisten únicamente en contar segundos o parte de preguntarnos si se puede estar cincuenta minutos aplaudiendo. El ámbito teatral está menos familiarizado con esa dinámica, tiene otras formas de atrapar la atención de la gente”.