La denegación del visado de trabajo de los Estados Unidos y el envío de un correo electrónico cambiaron el destino de Alejandro Azorín (Yecla, 1994). En lugar del Boston Ballet, el intérprete murciano desembarcó en el Semperoper Ballett de Dresde en 2015. La curiosidad al ver una prima que hacía sus pinitos en el ballet introdujo la danza en su vida y después de formarse en la escuela de José Antonio Robles en Murcia, en el School of American Ballet de Nueva York y en el Pacific Northwest Ballet School en Seattle, Azorín se estableció en la capital del estado alemán de Sajonia, en cuya compañía alcanzó la categoría de bailarín principal el año pasado. Tanto le ha gustado la experiencia en el país teutón que ha fichado por el Ballett am Rhein de Düsseldorf para la próxima temporada....